viernes, 4 de septiembre de 2015

Cumareberias Historicas (PARTE 2)

CUMAREBO
POR SIEMPRE











ASPECTOS, DETALLES, RECOPILACIÓN, INVESTIGACIÓN  Y ESTUDIOS, DE LOS  ORÍGENES, RAÍCES COSMOGÓNICAS Y COSMOGRÁFICAS, QUE SE CONJUGAN EN LA YUXTAPOSICIÓN Y ANTONOMASIA DE LA  NOMINACIÓN, NOMBRADÍA Y CREACIÓN DEL NOMBRE, GENTILICIO Y TOPONIMIA DE
PUERTO CUMAREBO,                “LA PERLA DE FALCÓN”
         En la importantísima e interesada búsqueda por aclarar, conocer y dar a conocer los detalles acerca de los acontecimientos históricos que envuelven la trayectoria historiográfica y vivencial de nuestro territorio natal, en los diferentes documentos existentes de poca cuantía y en el interés por indagar en los datos que al respecto han escrito versadamente los pocos historiadores, ensayistas, interesados, investigadores, cronistas y demás escritores versados en este tema; me he topado con algunos documentos (que, no sé porque, no se publicitan y no se han publicado para mostrarle al público) donde van apareciendo asuntos que, por el valioso contenido que los mismos encierran, merecen y es obligación de nuestras autoridades locales, darlos a conocer.
         En este, nuestro caso, cuando se hace presente la duda referente al   Cumarebo como villa o aldea  poblada y demás aspectos esclarecedores que debemos conocer, me propongo plasmar, producto de una cosecha de investigaciones, que al analizarlas, permiten al estudioso e indagador de estos ¿misterios?, las resultantes investigativas, con la carga de informaciones de los elementos de juicios pertinentes, con las informaciones relevantes y dignas de total crédito, del acontecer histórico originario de Cumarebo.
         Estas inquietudes que me han mantenido -desde siempre- en la preocupación e indagación por estas cuestiones, me motivan y me llevan                 -entonces- a circunscribir dichos resultados, en una especie de pergamino (si cabe la expresión), que conlleva, además de su explicación, las respuestas a la preguntas que originalmente nos hemos hecho los cumarebenses, en lo tocante a este tema y que, en su redacción sinóptica, presento en tres planteamientos y secciones o etapas vivenciales que conllevan -tal vez-  a desentrañar en estas fases indagatorias, las intríngulis inquietantes, en la cuestión que me atañe y que me permito especificarlas, dándole a cada una de ellas, la información pertinente y concatenadas de ellas entre sí, en la manera siguiente:
1.-GÉNESIS: (“Teoría de la formación territorial del universo”).                                       
 Sin la pretensión de encuadrar comparaciones, por aquello de que las comparaciones nos son buenas ni recomendables; pero sí, en la intención de verificar ciertas afirmaciones, debo empezar por mencionar la referencia incógnita sobre el origen y formación del jardín del Edén, El Paraíso Terrenal.
Sobre las dudas, en lo que toca a su aparición, se mantuvieron ciertas y variadas hipótesis, hasta que la Iglesia, algunos documentos y muchos libros, entre ellos, la Biblia, dejaron asentados y aclaradas estas inquietudes iniciales; de igual manera, somos muchos quienes nos hemos preguntado, en igual similitud del desconocimiento y las dudas existentes, sobre la aparición de Cumarebo, en el tiempo y en el espacio que hoy ocupa; motivo por cual, en este tema, es importante y necesario aclarar que, en cuanto a la formación como tal de Cumarebo, hay que responder a estas interrogantes
¿CUANDO Y EN QUE ESPACIO SE FORMA CUMAREBO EN SU SISTEMA COSMOGÓNICO Y TERRITORIAL? (Sistema cosmogónico: es la Teoría aplicada al estudio de la formación territorial del Universo).
         Atendiendo a documentos debidamente comprobados, se tiene conocimiento que Cumarebo, como villa o aldea poblada data de la época de seis años después de la fundación de Coro; por lo que, si damos por ciertas y validamos estas informaciones, si Coro fue fundado el año 1527, Cumarebo, por tanto, tiene una existencia real desde el año 1533.
      Este dato sobre la existencia de nuestro terruño local, derriba ciertas datas históricas de nuestra formación como región poblada que algunos escritores empeñados en distorsionar (a lo mejor por capricho, ignorancia,  desconocimiento real o no se sabe por cuál motivo)) designan fechas mucho más recientes de la aparición poblacional cumarebense y sólo se circunscriben en vendernos la existencia de nuestro poblado, enfatizados desde el 17 de mayo de 1845; obviando y “desapareciendo” muchas generaciones ancestrales     
Para el conocimiento de estos históricos señalamientos documentales, tan resaltantes para la clarificación de los anales vivenciales de nuestro puerto, es importantísimo y necesario resaltar (aunque en forma sucinta), estos datos referenciales, enfatizando en la numerología de las fechas citadas, para   determinar valederamente que la real y antigua data de la formación del origen poblacional de Cumarebo, para la fecha actual que escribimos estas notas, se debe significar la data de la edad y la existencial realidad de Cumarebo, en el tiempo y en el espacio, es de 482 (cuatrocientos ochenta y dos) años de existencia, en su formación territorial poblada y habitada: (1533-2015)
2.- FILOLOGÍA: (Estudio de la vida intelectual, social, laboral, artística, cultural, educativa, religiosa y demás aspectos que signan las costumbres vivenciales de los habitantes de los pueblos).          
      Es decir; en cuanto a los primeros seres humanos que se asentaron en Cumarebo, en su condición de habitantes, también es necesario conocer algunas cosas, para poder deslindar la “verdad verdadera” de tan importantísimo interés ancestral y, basados en los documentos existentes, corresponde -entonces- responder y aclarar las siguientes preguntas:
¿CÓMO ERAN; CUAL ERA LA FORMA DE VIDA DE LOS PRIMEROS  HABITANTES QUE POBLARON CUMAREBO Y CÓMO SE DESEMPEÑABAN SUS GRUPOS ÉTNICOS?  
      No debiera decir que lastimosamente, pero sí, lamentablemente, en nuestra localidad zamorana y, específicamente en nuestra población de Cumarebo,  no hay manera de obtener información precisa de nuestra identidad, ya que no existe un espacio oficial ni una oficina pública destinada para el Acervo Histórico local y del municipio Zamora en general; ya que, los documentos historiográficos de Cumarebo están en manos particulares, que los mantienen cautivos en recintos familiares y es difícil, por no decir imposible, que permitan el acceso libre informático para satisfacer las necesidades de conocimiento e investigación. Estos documentos manejados a discreción de quienes los tienen en resguardo, además de no darle la utilidad del y para el conocimiento como tal, están -tal vez- en condiciones de deterioros e inalcanzables para adentrarse en el conocimiento pleno de nuestra comunidad.  
      No obstante; para beneplácito nuestro, existen documentos -entre ellos, este que a continuación se señala- que permiten enterarnos de informaciones referidas de nuestras historicidades muy importantes y fundamentales al respecto. Es importante, por ende, resaltar la existencia de un documento manuscrito, que a la letra, según la especificidad de dicho documento escrito nos entera minuciosamente del porte característico de los indígenas autóctonos; sus formas de vida, sus costumbres y la forma de vida genérica de nuestros primeros pobladores, y que, en una carta familiar, destaca los aspectos vivenciales señalados de la siguiente forma:
      Según el historiador Juan Friede, el día 5 de septiembre de 1505, aparece una carta personal firmada por el alemán Titus Neukomn, enviada desde esta zona, a su señora madre Elizabeth Neukomn, cuya misiva se puede considerar como la primera descripción de los moradores de esta zona
      Por ello; tomando en verbigracia dicho relato (ya era el tiempo de los Wélsers), nuestros aborígenes que alude el remitente, eran -por antonomasia- los mismos seres que emergían de nuestras etnias zamoranas originarias y que, al efecto eran, de acuerdo a lo que se indica a continuación, los retratos escritos personalísimos de los iniciales pobladores de nuestro Cumarebo:
·        Los indígenas pobladores, de poca estatura, piel de color pardo, andan desnudos; pero cubren su vergüenza (los hombres), vaciando una planta pequeña y alargada (como la calabaza alemana), del largo, más o menos de un palmo no enmarcado, el cual cortan un poco atrás y en ella, introducen su miembro viril, atando esta protección natural con una cuerda de algodón, alrededor del cuerpo, que los mantiene erectos, por delante y; por detrás, los dos testículos, que no los cubren, sino que los dejan colgando al aire libre.
·        Las mueres, por su parte, cubren sus partes íntimas, púdicas-inguinales, con un paño pequeño hecho de corteza del árbol del algodón, que colocan alrededor de sus vientres, por debajo del ombligo (que llaman cachube y/o maruto), metiendo el trapo por debajo y lo pasan entre las entrepiernas y lo fijan con la misma cuerda.
·        Las mujeres se adornan con unos collares hechos con piedras rojas y blancas y muchas conchas de distintos colores que se colocan en el cuello y que lían 40 o 50 veces alrededor de la garganta.
·        No se cubren los senos y las glándulas mamarias (tetas), las cargan al descubierto, sin impudor ni desvergüenza alguna.
·        Los hombres; en cambio, se cuelgan de la nariz, un pedazo de oro de distintas formas, mientras que las mujeres, se los colocan en la orejas.
·        Para los hombres, estas piedras tiene mucho valor, los miden por palmos y con ellas venden y compran, utilizándolas como monedas, aunque la importancia monetaria, para ellos, la tiene el oro.
·        Para la defensa personal/familiar, los hombres fabrican arcos con bejucos muy resistentes y fuertes, los que tiran muy seguros y  lejos.
·        Las flechas para tirar con estos arcos las confeccionan con huesos y dientes de pescados, las cuales untan con el veneno de una planta de efectos mortales.
·        En su andar por el campo, llevan atrás, en sus espaldas, guindando del cuello, una calabaza redonda y una mochila donde llevan un polvo blanco parecido a la cal alemana y en esa mochila depositan unas hojas de una planta que no se encuentra en todas partes; con esas hojas y con el polvo blanco, aguantan caminando hasta 8 días sin comer, beber, ni consumir otra cosa-
·        No usan camas sino que fabrican tejidos alargados de algodón que cuelgan entre los árboles y en ellos duermen.
·        Los hombres son lampiños, sin barbas, pero de cabellos largos.
·        Su alimento diario es a base de pescado, venados, conejos y carnes de animales de diferentes especies silvestres; además que consumen muchas raíces que aran y cocinan.
·        El grano del que hacen su pan, crece en forma redonda y alargada, con muchas semillas que desgranan de un tronco que llaman tusa: Con estos granos, también hacen una bebida para emborracharse, como en    Alemania, lo hacen con el vino.
·        Cuando muere un indio noble, queman y reducen su cuerpo, hasta el polvo, que echan en sus bebidas; hacen una gran fiesta y por varios días se emborrachan hasta perder el conocimiento.
·        Cuando el que muere, es un indio pobre, su cadáver lo entierran prontamente, como en Alemania hacen con los animales.
Además de esta interesante e histórica misiva, acerca de nuestros ancestros pobladores, paisanos de luengos años ha, que eran conocedores y sabían de algunos detalles sobre las primeras oleadas poblacionales en Cumarebo, referían casos muy fehacientes -tal vez de sus antepasados-; por lo que se puede inferir que su comportamiento como grupos étnicos radicaban en aspectos comunitarios como estos:
·        Trabajaban la tierra, apacentaban sus rebaños; asistían a los cultos religiosos en la fe del Dios que alababan que profesaban,
·        En su sapiencia del conocimiento, descifraban el tiempo con el pasar y formación de las nubes.                              
·        Eran de aspecto apacible y parsimonioso, pero de carácter firme y serio en su proceder y honestos a carta cabal demostrado en todos el valor en cada uno de sus procederes accionarios.              
·        Vivian de la pesca, de la agricultura, de la cría de animales domésticos y de corral: (chivos, ovejos, gallos, gallinas, loros, patos, pavos, hicoteas, morrocoyes, burros, caballos, yeguas, cochinos y, unas que otras vacas, terneras, becerros y toros); mientras que los perros y gatos deambulaban por las calles y solares de las dispersa casas de familia.
·        Cazaban en los montes diferentes tipos de especies silvestres: (venados, báquiros, iguanas, lapas, cachicamos, chigüires) y unas que otras palomas de variadas especies.           
·        Eran hombres trabajadores y las mujeres, además de atender a los quehaceres de la casa y de parir y criar sus hijos, en sus pocos ratos de solaz descanso, le robaban al tiempo su inquietud laboriosa para tejer hamacas, sombreros, sillas, bordar y otros ocupados menesteres.
·        Cumarebo lucía el tranquilo esplendor de sus estampas naturales de sus altibajos cerros, pequeñas llanuras, la placidez de las playas en su yodado mar Caribe, con pequeños promontorios arenosos que formaban sus dunas, semejantes a pequeños medanales silentes
·        Por esa misma tranquilidad y honestidad pueblerina de la manera de vivir y ser de estos cumareberos, se dormía con las puertas abiertas, aprovechando el suave frescor del rocío de su temperatura agradable en sus noches aguaceradas y refrescantes de su nocturnidad sana
·        Así  mismo; de sus cristalinos arroyuelos, pequeñas vertientes acuíferas que emanaban en las cuevas de sus agrestes montañas, manantiales y nacimientos que brotaban en sus estepas, se surtían del agua potable para el consumo humano y del hogar, así como para calmar la sed de sus animales doméstico y cubrir sus necesidades de aseo personal.

·        En sus pequeños riachuelos, jóvenes y adultos, arponeaban y pescaban las especies marinas que ayudaban al sustento diario; y, en las orillas de estos ríos, las mujeres acudían a lavar las ropas y lencería familiar, al mismo tiempo que aprovechaban para darse su baño. 
·        El respeto por los padres y por los demás; por la familia, por las personas mayores y por todos en general, era un himno inviolable que, a los hijos se les enseñaba a practicar desde muy niños y, la fe y la creencia en Dios y la virgen de Candelaria por encima de todas cosas; era el valor más arraigado de estos pioneros pobladores de Cumarebo.                                                               

 ¡¡Así era la vida de los primeros pobladores de nuestro territorio!!     
3.- ORIGEN: (Principio, procedencia, derivado, ascendencia, descendencia, cuna, motivo, causa, moralidad, fuente, nacimiento, raíz y demás circunstancias que envuelven la aparición de algo nuevo).            
       Parra despejar toda la incógnita intríngulis tejida sobre la raíz del origen de la palabra Cumarebo, es necesario consustanciarse con la etimología que esta nominación conlleva; indagar (como se estila hoy en día), en el pedigrí vivencial y circunstancial de estas -algunas- procedencias explicativas.
      De allí que, para la explicación comprensiva, es necesario e importante que descifremos las desconocidas interrogantes planteadas en este caso:
¿DE DÓNDE, DE QUIÉN, QUE SIGNIFICA Y DE QUE MANERA NACE EL SUSTANTIVO DE LA PALABRA CUMAREBO?
Mucho se ha escrito sobre la procedencia del sustantivo Cumarebo, pero -infortunadamente- algunas de estas informaciones (que no todas), adolecen de la veracidad correspondiente a lo que les corresponde. En estas lamentables y anti históricas circunstancias y, ante la tozudez errática de algunos pocos paisanos y no paisanos, que se empeñan en sus “escritos históricos” distorsionar en sus afirmaciones de la expresión sustantiva Cumarebo, afirmando, entre otras de sus barbaridades mal informantes y nada educativas al publicar, por ejemplo, que esta derivación es producida en reconocimiento y  honor al Cacique Cumarebo y, sin querer, desmeritan el valor guerrero, moral y personal de nuestro adalid indígena.
Por ello, es necesario aplicar la “realidad real” de esta conceptualización, por cuanto nuestra insigne toponimia ancestral, se coadyuva con una preclara nombradía y, para quienes conocen la verdadera procedencia de origen, raíz y cuna de este sustantivo, es valederamente imprescindible el hacer valer sus conocimientos verdaderos de nuestra toponimia y tratar, en lo posible, demostrar la significación gramatical que origina la expresión Cumarebo y sus gentilicios: Cumarebero”, “Cumarebense”, “Cumarebiano”…
         Buscando -por lo tanto- enmendar dichos garrafales entuertos, imprescindiblemente positivo es, la aclaratoria de esta verdad, tan noble e inmensa como la fe en los templos, en lo tocante a la historiografía que para nuestro territorio natal representa, puesto que para nosotros, los hijos de este terruño, para los visitantes, para los por siempre enamorados y admiradores de nuestra patria chica, para los acuciosos paisanos que hurgan en nuestra historia en la búsqueda de aumentar sus conocimientos indagatorios y; de manera específica para nuestros estudiantes, investigadores, lectores y todo el público en general, hay que determinar en su moralidad circunstancial, en sus causas, consecuencias valederas y en el interés por dar a conocer el significado que como tal nos favorece, y esclarecer las cuestiones referentes al tema de nuestra nombradía originaria, e indagando sobre esta temática, cabe preguntarse:   
¿DE DÓNDE, DE QUÉ, DE QUIÉN, Y POR QUÉ, SE ORIGINA EL NOMBRE CUMAREBO Y SUS GENTILICIOS CUMAREBEROS,,,?
         En los remotos años citados, cuando se comienza a poblar esta región, en el transcurrir de sus tiempos, sus habitantes comienzan a organizar sus diferentes formas de  vida, en sus propios hogares y en sus conformaciones  hogareñas, familiares, educativas, culturales, sociales, institucionales, religiosas y en los demás cuadros de la población, surge un dirigente y  líder vecinal que -por supuesto- por sus demostradas acciones en favor de su población y de sus gente, en defensa de todo sus intereses, es reconocido y aclamado por la comunidad; naturalmente, este líder como en todas las demostraciones conocidas de la humanidad, tiene una nominación que le identifica como dirigente comunitario; este líder es distinguido con una nombradía especial que lo diferencia de los demás pobladores que le siguen
         En nuestra región, en los primeros tiempos de nuestra formación como villa habitada, el jefe mayor de la “Tribu”, era conocido con el calificativo de “CUMARÍ”, el gran ductor de las pobladas nuestras; y es de allí -entonces- que quienes les seguían (así como a los seguidores de Cristo, les denominan cristianos), a este nuestro terruño, se le comenzó a distinguir como las tierras de CUMARÍ que, con el pasar del tiempo, al agregarle el sufijo ebo, fue cuando se empezó a  denominarlo CUMAREBO  (que en lengua de los Caquetíos, significa “sitio fértil del mar”).  
      Ahora bien; la desinencia literal de ese nombre, por la unión de las dos vocales (i – e), se elimina la vocal débil /i), para evitar -tal vez- una disonancia cacofónica, y, en vez de denominar la asonancia del derivado de la raíz Cumarí con el sufijo Ebo Literalmente Cumariebo), se emplea directamente el sustantivo “CUMAREBO” y con ello, se llega a determinar que es este sustantivo el real origen de nuestra  toponimia bautismal CUMAREBO, el cual proviene del líder CUMARI con la resultante que, a nosotros, todos los hijos de CUMAREBO, el gentilicio nominal sea el de CUMAREBEROS.  
      Para aclarar un poco estas afirmaciones, bueno es pasearnos someramente por un poco de esta significación: Luego de conocer que Cumarebo tiene una data del año 1533, aunque la carta del alemán Friere, data del año 1505,  hacia acá, en sus transformaciones socio-culturales,  emergió un líder indígena que, con el transcurrir del tiempo se le conoció como el cacique Cumarebo (quién tuvo dos hermanos Permarore -nombre indígena- y Alejandro -su nombre cristiano-, al que no le podido conocer su real nombre indigenista).
      Tanto el Cacique Cumarebo como sus dos hermanos fueron hechos prisioneros en sus dominios, por el conquistador alemán Juan de Carvajal, quien los trasladó y encerró en la población El Tocuyo; pero a estas tierras, por la época de los años de 1540-1541, llegó  Felipe Von Hutten, otro conquistador que en los cuatro años que duró en esta  región, era, más que guerrero, un poeta y una de sus más gloriosas heroicidades en nuestro favor, fue la de liberar al Cacique Cumarebo y a sus hermanos de la prisión que los mantenía Juan de Carvajal, dándoles la libertad de escoger entre seguirlo a Él o volver a radicarse en sus tierras de origen.
      De allí que, en nuestra historia patria chica, a Felipe Von Hutten se le tiene y debe reconocer como “El Libertador del Cacique Cumarebo”, aunque no se le haya dado el sitial que esta acción le corresponde merecer.
      A raíz de esta enemistad entre estos alemanes conquistadores, Juan de Carvajal persiste en una persecución terrible contra Felipe Von Hutten, al punto que logra capturarlo y mandarlo a asesinar por sus esbirros y, en el sitio epónimo (en honor a esta adalid liberador) en forma cruel, muere El Libertador del Cacique Cumarebo, en el año 1542, a los 34 años de edad..            
Distinguidos y apreciados cofrades, amigos, paisanos y coterráneos; de esta manera clara, corta y explicativamente sencilla, se pretende dejar totalmente aclarado y establecido historiográficamente que es del gran y heroico Jefe Guerrero CUMARÍ, de donde proviene el sustantivo y apelativo de la nombradía toponímica CUMAREBO;  y es de esta misma derivación de su raíz nominal que orgullosamente seamos netamente ¡¡CUMAREBEROS,!!
Es de mucha relevancia expresar que, el gentilicio Cumarebero, en su  manifestación genérica como fonema, comprende los elementos sonoros del lenguaje y, en ese mismo sentido fonético, representa en sí mismo, las acepciones de los sonidos vocales y, en ese fonetismo, es válido poder decir: Cumarebero, Cumarebense, Cumarebiano, como gentilicios de Cumarebo.
Recomiendo (si me lo permite los lectores): conocer más detalles de la historiografía zamorana, leer los libros editados de mi ´propia autoría: ”Remembranzas Zamoranas” y “Huellas, el Puerto de Nuestra Señora de Candelaria de Cumarebo, la Perla de Falcón” y los textos que aunque no editados por falta de recursos: “Antología Poética para las Damas Zamoranas”, Vivencias y Ocurrencias Cumarebenses”, “En el nombre de los Apodos del Cumarebo Aquel, del Hoy y del Siempre”, “Palabras Cumareberas”, “Onomatología Zamorana”, “La Flor de Ají en General”, Apostillas Literarias“, Palabras Discursivas y otras obras que -igualmente- están incluidos en esta Página Web, donde detallo más aspectos de nuestra historia local y municipal.



1 comentario:

  1. soy CUMAREBERO Y ME CIENTO MUY ORGULLOSO QUISIERA QUE RESALTARAN LOS VALORES DEPORTIVOS SOY SOBRINO DEL FAMOSO SURDO SAAVEDRA QUE TANTAS JUGADAS Y JONRONES NOS DIO Y A SU HIJO QUE LLEGO A JUGAR CON LOS CARDENALES DE LARA Y FUE A ENTRENAMIENTOS A LOS ESTADOS UNIDOS EL PAPA SAAVEDRA ESOS VALORES SE RESALTAN GRACIAS UN GRAN SALUDO A TODOS MIS PAISANOS

    ResponderBorrar